Para sorpresa de nadie, Nioh 2, como un buen soulslike que es, tiene algunos jefes bastante duros. La mayoría de estos jefes aparecen en las misiones principales y resurgen en misiones secundarias. Otros son pruebas finales del Dojo y generalmente suelen atacar de manera diferente. Lo que si tienen en común todos los jefes de Nioh 2 es la capacidad de captar nuestra atención y atraparnos en un combate duradero.
Como ya os comentamos en la guía de los consejos en tus primeros pasos en Nioh, el tema del combate es un aspecto muy importante. Este género de juegos desprende mucho desafío y, sin duda, nuestro personaje tiene que estar preparado para todo a lo que se vaya a enfrentar.
Nuestra idea con esta guía ha sido realizar una lista con los diez jefes que consideramos más difíciles. Sin embargo, no deja de ser un punto de vista que podrá cambiar según la percepción de cada persona. La lista puede también variar a medida que juegas con seguridad y vuelves a enfrentarte a ellos. Ahora sí, ¿Cuál creéis que son los más difíciles? Para nosotros son los siguientes:
Los diez jefes más difíciles de Nioh 2
Dama Osakabe
Dama Osakabe es una yokai que ha poseído todo un castillo, lo que le ha dado al edificio su fuerza vital. En otras palabras, nos enfrentamos a un castillo. Este jefe es un gran reto porque ataca a sus enemigos usando tentáculos con forma de cabello que contienen amrita en su núcleo. Las puntas de estos tentáculos tienen órganos que desencadenan ataques elementales.
La dificultad de este combate es cuando te enfrentas a un tentáculo y caes ante una lluvia de daño elemental que tienes que esquivar. Además, cuando eliminamos un tentáculo, aparece otro en el otro lado, y tienes que jugar con el equilibrio. Se convierte también en un jefe difícil para jugar en cooperativo porque se necesita de mucha compenetración.
Ryomen Sukuna
La forma inusual de Ryomen Sukuna está compuesta por dos demonios, rojo y azul, que se unen a sus espaldas. Ellos irán girando hacía ti y no pararán hasta atraparte con sus hachas. Por ello, lo importante será atacar cada mitad con el elemento que le sea vulnerable.
El demonio rojo lucha como el fuego, violento y agresivo, mientras que el demonio azul lucha como el hielo, con astucia. Te recomendamos luchar contra la forma roja tanto como sea posible, pero siempre esquivando su carga.
Kashin Koji
Este jefe es toda una caja de sorpresas. Se convierte en un lanzador de hechizos y acumulará charcos alrededor del campo de batalla. Si te acercas mucho a él, convocará un rayo a su alrededor y luego atacará con una hoja de escarcha gigante. Esto puede parecer difícil, pero la parte dura es cuando entra en el Reino Oscuro y usa su espada para algunos combos peligrosos.
En ocasiones, también convocará un clon que usa una ola de fuego mientras sigue con su combo. En un momento, pueden aparecer cuatro clones para cortarte a la vez e incluso Kashin Koji puede teletransportarse para atacarte. Bueno, toda una odisea para averiguar perfectamente cada mecánica y hacerte con el combate.
Saika Magoichi
Este jefe regresa de la primera entrega de Nioh. Lo más peligroso de él es su astucia y su rapidez, además de esquivar todos los disparos de su arma. Hay que ser precavido y en cada ataque retroceder para que no nos haga nada de daño con su espada. Créenos porque es muy dañina. También hay que tener cuidado con las bolas de fuego. En otras palabras, concéntrate para evadir todo su daño, contrarresta sus ataques explosivos e intenta derribarlo cuanto antes.
Otakemaru
Este jefe es considerado una gran leyenda en Japón. Las tres espadas que empuña se conocen colectivamente como Sanmyoke. Ese nombre está formado por los tres tesoros del cielo: Daitoren, Shotoren y Kenmyoren. Con ellas reunirá todas sus fuerzas para convocar rayos o fuego desde el cielo.
Lo importante de este combate no solo son sus armas, sino las diferentes fases que existirán. En la primera irá cambiando de forma y golpeará muy rápido. En la segunda, habrá que lidiar con un ataque bastante fuerte casi imposible de contrarrestar. En la tercera, convocará dos espadas que flotan a su alrededor. El bloqueo es casi inútil en esta fase y, además, habrá que lidiar con todos los ataques anteriores.
Katsuie Shibata
En el segundo enfrentamiento contra Katsui Shibata se convierte en un gran reto. Su objetivo principal será cargar contra ti por un daño masivo. Carga constantemente, y en el Reino Oscuro, golpeará con sus hachas haciendo un remolino de fuego. El problema con esta pelea, además del daño que hace con sus hachas, es la gran cantidad de vida que tiene y los cambios que hace continuamente.
Kamaitachi
Llegas al borde de un barranco cuando saltas y de repente aparece Kamaitachi. Es probablemente el jefe más rápido y constante en sus movimientos que exista en Nioh 2. Subirá a los árboles, como si de una enredadera se tratase, y cargará hacia ti. Luego seguirá girando constantemente para atacar y lanzar rebanadas de torbellinos.
Lo importante de este combate es no ansiarte en atacar, sino bloquear y buscar siempre la mejor combinación de golpes. Evita su cola y no le pierdas de vista. El ataque con su cola es muy peligroso y en ocasiones mortal.
Gyuki
Gyuki es un enorme yokai con patas de araña y cabeza de toro. Nada más verlo impresiona bastante, pero su combate es bastante divertido. En cuanto a la primera fase, solo tendremos que buscar unas paredes de madera para que corra hacia nosotros y se quede atrapado con los cuernos. Sin embargo, tienes que tener cuidado con su pisotón que hace daño AoE.
Después de que las paredes sean destruidas, hay que apuntar a su cuerpo. Es bastante complicado porque hay que ponerse detrás y él no parará de moverse para ponerlo más difícil. Lo importante es que no pares de moverte y céntrate en una parte del cuerpo, evitando sus pisadas.
Kasha
En el combate contra Kasha no es tarea fácil predecir su próximo movimiento. La abrumadora cantidad de fuego que utiliza no se convierte en una tarea fácil de esquivar. El primer paso para derrotar a este yokai es encontrar una manera de lidiar con sus llamas. Dejará un rastro de estas a su paso, convirtiéndola en un yokai difícil de perseguir para atacarla.
Una vez que sea convocada en el Reino Oscuro, trata de no atacarla por detrás cuando golpee la pared, ya que rápidamente se dará la vuelta. En algún momento, también convocará a algunos secuaces para que la ayuden, pero estos se eliminan con facilidad.
Tatarimokke
Tatarimokke se convierte en el único jefe en forma de pájaro, obviando aquellos que se teletransportan. Su habilidad de vuelo lo hacen ser ágil, por lo que es crucial tener una estrategia para combatir contra él mientras está en el aire. El ataque de sus alas es rápido y es importante visualizarlos cuando estemos cerca de él. Otro ataque que tendremos que esquivar es cuando cae en picado y comienza a moverse de un lado a otro.
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