Si has decidido adentrarte en Rocket League, deberás de conocer primero la guía para principiantes, donde te damos los mejores consejos para tu primer contacto. No obstante, si esto ya lo tienes más que claro, deberías de saber que en cada partida es posible que mejores y puedas centrarte en otras mecánicas que te serán útiles para ganar el partido.
Cada mecánica de Rocket League se puede explotar de muchas maneras, pero los primeros pasos es no dejar de esforzarte y, principalmente, no olvidarte de divertirte. No pretendemos que te conviertas en un jugador profesional, pero, al menos, sí conozcas algunas técnicas que te pueden servir de ayuda, con esta guía te contamos algunos consejos útiles.
Mejora en Rocket League
Domina el control de tu coche
Lo más importante es que sepas controlar tu coche. Si no consigues dominarlo, es imposible que te sientas a gusto y satisfecho en cada jugada que hagas en los partidos. Hay algunas formas de trabajar el control del coche, como, por ejemplo, los modos de entrenamiento y las pistas de obstáculos. En estos recorridos podrás sacar el máximo provecho a tu vehículo y hacerte mejor con sus controles.
Juega a más de un modo
Una vez comienzas a jugar a Rocket League, es muy fácil que te enganches a su jugabilidad y pienses en una rutina de juego. Sin embargo, no solo te quedes pensando en el juego normal con batallas 3vs3, por ejemplo, sino cambia de este modo siempre que puedas, ya que muchas veces eso puede ser la razón que te permita mejorar en determinadas áreas y, a la vez, conocer las tácticas de cada modalidad.
Mantén el balón en el aire
Te preguntarás, ¿y para qué? Pues sencillo, es importante que sepas controlar el balón de por sí, pero si lo haces en el aire y a tu manera, este será solamente tocado por ti, lo que te ayudará a dirigirlo donde más te guste. Es posible que sea complicado al principio, pero poco a poco terminarás aprendiendo a mantenerlo en el aire más tiempo.
Cuidado con el uso del impulso
Al principio es probable que solo tengas en la cabeza "ir a por el balón lo más rápido posible", pero lo más importante es no utilizar continuamente el impulso limitado, ya que a veces es mejor guardarlo para otras ocasiones. Es una muy buena idea gestionar el impulso y mantener esa velocidad, ya que, de esa manera, el impulso más que verlo limitado, podrás sacarle mucho más partido y la barra no se consumirá al completo.
Juega 1vs1 contra alguien mejor que tú
A parte de jugar a otro modo, si lo haces con un 1vs1 te puede servir mucho de ayuda. Al principio no es un modo muy atractivo, ya que verte cara a cara contra una persona y sabiendo que estás aprendiendo, no puede ser muy gratificante. Sin embargo, lo mejor de este modo es conseguir que alguien mejor que tú juegue contra ti, básicamente para que te ayude a mejorar y sepa decirte cuales son los errores o problemas que ve en tu forma de jugar.
Revisa los vídeos de repetición
Esto es como el típico VAR en el fútbol. Al final las propias repeticiones de todos tus partidos y el verte desde otra perspectiva, te ayudará perfectamente a conocer tanto la parte buena como la mala. Estos vídeos son valiosos y los puedes tener en cuenta para tener una idea de cómo todo el equipo toma decisiones: cómo rotan, de qué manera lo hacen y para tener una idea del ritmo general de todo el equipo.
Prueba coches nuevos
En la guía sobre los mejores coches de Rocket League, os explicábamos cuales son los coches gratuitos realmente buenos y el Octane se convertía en el más utilizado. No obstante, cuando ya te hayas hecho con un coche y sepas controlarlo medianamente bien, puedes pasar a otros coches como el Dominus que puede ser una excelente manera de sentir el juego de una forma completamente nueva. Juega cada semana a un coche diferente y mira cómo te sientes cuando termines.
Aprende a rotar con otros jugadores
Cuando recién comienzas, el posicionamiento es lo más importante a lo que debes prestar atención. Puede parecer que todo el mundo está corriendo detrás del balón, pero una vez juegas por un tiempo, puedes comenzar a notar la necesidad de rotar. Sea el modo que sea, la portería nunca deberá de estar desatendida, por lo que, si uno o dos jugadores empujan hacia arriba para atacar, uno deberá permanecer en la defensa. Al final es una mecánica similar al fútbol, lo que tendrás que saber comunicarte bien con tus compañeros de equipo.
No persigas continuamente el balón
Al igual que es bastante importante saber rotar con otros jugadores, el no perseguir continuamente el balón es algo que deberías aprender desde el principio. El instinto te dirá que golpees el balón cada vez que se acerque, pero no, es mejor a veces quedarte atrás y evaluar quién está en una mejor posición para hacer el mejor frente a la pelota, o la mejor asistencia a un gol. En muchos casos, encontrarás que es el turno de retroceder y defender, incluso si no lo es, retroceder para defender es la mejor y más segura opción. No te obsesiones por golpear siempre el balón.